Hasta el cierre de esta edición solo había sido identificado uno de los occisos
Un intercambio de disparos, que se prolongó durante tres horas, dejó un saldo de 13 hombres muertos y otros 12 lesionados, según el reporte preliminar del caso.
Todo inició a las 2:30 de la madrugada de este 25 de abril, hora en la que algunos de los miembros del grupo de “los caraqueños” presuntamente intentaron romper la “línea de mando” establecida dentro del centro penitenciario.
Se supo que a pesar de la ferocidad del ataque y a la ráfaga de balas impulsada de un lado a otro, el cometido de los sujetos no fue cumplido a cabalidad.
Hasta el cierre de esta edición solo había sido identificado uno de los occisos, quien respondía al nombre de Giovanny Batista Casanova Pericana (33). Este cumplía condena por homicidio y robo.
Trascendió que Casanova Pericana era el tercero en el “tren de mando” del penal, el cual hasta ahora es comandado por Carlos Rondón, alias “el barúa”. Ambos miembros del grupo llamado “los gaiteros”.
Autoridades policiales y militares mantuvieron gran hermetismo en torno al suceso. En las emergencias de centros asistenciales tampoco quisieron ofrecer detalles sobre los lacerados.
Sin embargo, se pudo conocer que entre los heridos figuran Golfran Rivas Ramos (34), Ronald Marín Rondón (30), Carlos Alberto Montenegro (26), Edward Figueroa (33) Ronald Marcano Mendoza (33) y Josué Alexander Figueroa.
Además de Wiston Ramírez, Jesee González, Walter Júnior Rivero, Carlos Montanini y un último sujeto solo identificado por los apellidos Yegüez González.
Todos fueron atendidos en la emergencia del hospital Luis Razetti de la capital anzoatiguense. Presentaron entre tres y cuatro heridas por arma de fuego cada uno.
Incertidumbre
El grupo denominado “los caraqueños” echó la chispa sobre la pólvora mientras todos dormían la noche del martes, según datos extraoficiales. Estos sujetos, quienes fueron trasladados el año pasado desde la capital del país, aparentemente nunca aceptaron la figura del “pran” que desde entonces comanda Puente Ayala, como también es conocido el centro de reclusión.Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) fueron movilizados al penal desde temprano.
Las primeras horas de la mañana solo acumulaban la angustia y el desespero de los parientes de los presos, quienes únicamente se “alimentaban” de los rumores que corrían en las cercanías del lugar.
Una dama, quien no se identificó, lloraba sin cesar mientras caminaba por uno de los accesos del internado judicial José Antonio Anzoátegui.
Aseguró que cuando llegó, le negaron la entrada al recinto. Añadió que no le ofrecieron mayor explicación. “Es horrible no tener información sobre él”, comentó entre sollozos.
Pronunciamiento
Entre tanto, Iris Varela, ministra de Asuntos Penitenciarios, se pronunció la tarde de este martes sobre el motín de Puente Ayala.La autoridad aseguró que la matanza ocurrió porque unos desadaptados quisieron “embochinchar” al resto de los reos. Señaló que estos privados de libertad no quieren adaptarse a las normas del centro penitenciario Enfatizó que en las cárceles del país no mandan “grupitos ni mafias”.
Llamado
El director del Observatorio Venezolano de las Prisiones (OVP) Humberto Prado, exigió al Estado venezolano iniciar una investigación imparcial sobre el motín que se desató la madrugada de este 25 de abril en el internado judicial José Antonio Anzoátegui de Barcelona.Aseguró que en Puente Ayala funciona un sistema de “orden privado”, es decir, que se maneja la figura de “pranato”. Mencionó que es así como se mantiene el “orden” dentro del penal.
ElNorte.com.ve / Paúl Rivas