Desde hace algunas semanas, los anaqueles de farmacias, mercados
populares y hasta supermercados de la zona norte, permanecen llenos de
mercancía importada, lo cual al parecer está cubriendo la demanda.
Entre los productos ofrecidos por los comerciantes tanto formales como informales, están los de higiene personal como desodorantes, jabones de tocador, afeitadoras, cremas depiladoras, entre otras cosas.
A través de un recorrido por estos establecimientos, se pudo conocer que la venta de esta mercancía es muy baja, ya que los precios superan una cuarta parte del sueldo mínimo.
Entre los costos exhibidos están desodorantes desde tres mil hasta seis mil bolívares, jabones entre mil 500 y tres mil, afeitadoras en dos mil 500 y más.
“La gente pregunta por el precios, pero es muy difícil que alguien compre, ya que no es fácil que paguen cino mil 600 por un solo desodorante. Entonces prefieren comprar frutas, verduras, pan o cualquier otra cosa sin gastar ese monto. Además no les gusta porque estas marcas antes eran nacionales y hoy en día los comerciantes nos vemos en la necesidad de traerlos de manera importada, afirmó un vendedor que no se quiso identificar.
Descontento
La señora Carmen Méndez, precisó que el descontento ante la llegada de productos brasileños, o de cualquier otra parte del mundo, es amplio, ya que anteriormente todos esos rubros y productos de higiene personal salían de las fabricas nacionales.
“Nadie dice lo difícil que se hace hoy en día comprar esos productos. Es cierto que ahora la harina, el azúcar, los desodorantes y hasta el jabón de baño se consiguen con facilidad, pero es casi imposible dejar de comer por adquirirlos”, alegó Méndez.
Asimismo, la consumidora y habitante capitalina, pidió a las autoridades competentes analizar el costo que hoy en día los comerciantes les colocan a esos rubros importados, ya que lo regulado se torna costoso y con la ganancia agregada representa un gasto aún mayor.
Nueva Prensa de Oriente
Entre los productos ofrecidos por los comerciantes tanto formales como informales, están los de higiene personal como desodorantes, jabones de tocador, afeitadoras, cremas depiladoras, entre otras cosas.
A través de un recorrido por estos establecimientos, se pudo conocer que la venta de esta mercancía es muy baja, ya que los precios superan una cuarta parte del sueldo mínimo.
Entre los costos exhibidos están desodorantes desde tres mil hasta seis mil bolívares, jabones entre mil 500 y tres mil, afeitadoras en dos mil 500 y más.
“La gente pregunta por el precios, pero es muy difícil que alguien compre, ya que no es fácil que paguen cino mil 600 por un solo desodorante. Entonces prefieren comprar frutas, verduras, pan o cualquier otra cosa sin gastar ese monto. Además no les gusta porque estas marcas antes eran nacionales y hoy en día los comerciantes nos vemos en la necesidad de traerlos de manera importada, afirmó un vendedor que no se quiso identificar.
Descontento
La señora Carmen Méndez, precisó que el descontento ante la llegada de productos brasileños, o de cualquier otra parte del mundo, es amplio, ya que anteriormente todos esos rubros y productos de higiene personal salían de las fabricas nacionales.
“Nadie dice lo difícil que se hace hoy en día comprar esos productos. Es cierto que ahora la harina, el azúcar, los desodorantes y hasta el jabón de baño se consiguen con facilidad, pero es casi imposible dejar de comer por adquirirlos”, alegó Méndez.
Asimismo, la consumidora y habitante capitalina, pidió a las autoridades competentes analizar el costo que hoy en día los comerciantes les colocan a esos rubros importados, ya que lo regulado se torna costoso y con la ganancia agregada representa un gasto aún mayor.
Nueva Prensa de Oriente