Rusia y Arabia Saudí logran consenso sobre congelación de la extracción de crudo, luego del preacuerdo con Venezuela
Recientemente, el Gobierno ruso adelantó que
aumentará este año la extracción con respecto a 2015, pero la mantendrá
en los niveles de enero pasado, en línea con el preacuerdo de
congelación de la producción alcanzado en febrero con Venezuela, Arabia
Saudí y Catar.
Rusia y Arabia Saudí alcanzaron este martes un principio de acuerdo
sobre la congelación de la extracción de petróleo, en vísperas de la
reunión de exportadores que se celebrará la próxima semana en Doha.
"Hoy tuvieron lugar contactos entre representantes de Arabia Saudí y
Rusia, durante los que lograron un consenso sobre la congelación de la
extracción de crudo", informaron fuentes diplomáticas a la agencia rusa
Interfax.
Arabia Saudí explicó en Doha a la parte rusa que su decisión final no se verá influida por la postura de Irán, que se niega a congelar la extracción ya que acaba de reanudar las exportaciones de petróleo tras el levantamiento de las sanciones internacionales, agregó la fuente.
Rusia se mostró dispuesta a hacer una excepción con Teherán, que no limitará la producción hasta que alcance los niveles anteriores a la entrada en vigor de las sanciones.
"La extracción de crudo aumentará en el marco de los acuerdos de Doha. Oscilará entre los 536 y los 540 millones de toneladas", dijo el viceministro de Energía ruso, Alexéi Teksler.
El funcionario explicó que esas cifras representarán un ligero aumento en relación con los volúmenes de 2015, cuando se extrajeron 534,2 millones de toneladas de petróleo.
Con todo, Rusia mantiene su compromiso de conservar durante todo el año los niveles de extracción de enero, cuando aumentó un 1,5 % con respecto a 2015, para lo que mantiene "un control diario" sobre la producción de los diferentes yacimientos del país.
Rusia se comprometió a congelar la extracción, pero con la condición de que ese paso sea secundado por el resto de exportadores de petróleo.
La propuesta de congelación será abordada por los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, además de otros Estados productores, como Rusia, el próximo 17 de abril en Doha.
El objetivo de esta medida es estabilizar el precio del crudo en los mercados internacionales, después de que este haya caído a sus niveles más bajos desde hace doce años debido a un exceso de oferta.
Arabia Saudí explicó en Doha a la parte rusa que su decisión final no se verá influida por la postura de Irán, que se niega a congelar la extracción ya que acaba de reanudar las exportaciones de petróleo tras el levantamiento de las sanciones internacionales, agregó la fuente.
Rusia se mostró dispuesta a hacer una excepción con Teherán, que no limitará la producción hasta que alcance los niveles anteriores a la entrada en vigor de las sanciones.
"La extracción de crudo aumentará en el marco de los acuerdos de Doha. Oscilará entre los 536 y los 540 millones de toneladas", dijo el viceministro de Energía ruso, Alexéi Teksler.
El funcionario explicó que esas cifras representarán un ligero aumento en relación con los volúmenes de 2015, cuando se extrajeron 534,2 millones de toneladas de petróleo.
Con todo, Rusia mantiene su compromiso de conservar durante todo el año los niveles de extracción de enero, cuando aumentó un 1,5 % con respecto a 2015, para lo que mantiene "un control diario" sobre la producción de los diferentes yacimientos del país.
Rusia se comprometió a congelar la extracción, pero con la condición de que ese paso sea secundado por el resto de exportadores de petróleo.
La propuesta de congelación será abordada por los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, además de otros Estados productores, como Rusia, el próximo 17 de abril en Doha.
El objetivo de esta medida es estabilizar el precio del crudo en los mercados internacionales, después de que este haya caído a sus niveles más bajos desde hace doce años debido a un exceso de oferta.
El Sol de Margarita / EFE