El Banco Central de Venezuela dará a conocer los nuevos dos billetes
con más alta denominación en función de adaptar el cono monetario
venezolano a las necesidades que impone la coyuntura económica que
atraviesa el país.
Fuentes de economía venezolana señalan que los próximos billetes que entrarán en circulación serán los de Bs. 500 y Bs. 1.000, para permitir una mayor comodidad de las transacciones que se realizan en efectivo.
Por otra parte, tienen previsto eliminar los billetes de más baja denominación, ya que actualmente no tienen uso y terminan complicando las transacciones.
La idea que se plantea el BCV es redireccionar los recursos, esfuerzos de impresión y distribución de los billetes de Bs. 2 y Bs. 5 hasta los de más alta denominación y así darle mayor fluidez a las operaciones que se llevan a cabo entre los agentes económicos del mercado.
Esta decisión también apunta a que los servicios prestados por el sistema financiero a sus clientes se haga más eficiente y no implique un incremento sustancial y sostenido de sus costos de logística y funcionamiento.
Desde el sector bancario optan por esta iniciativa para que varias de sus actividades se hacen más fluidas, tanto en las agencias como en el suministro a los cajeros automáticos.
Con estos nuevos billetes la reposición de efectivo en agencias y cajeros automáticos se hará más eficiente porque requerirá de menos frecuencias, con lo que se disminuyen los riesgos inherentes al traslado de dinero en efectivo en los vehículos blindados.
Una queja continua de los usuarios son los largos recorridos que deben hacerse los fines de semana para “conseguir un cajero con plata”. Esta situación cambiaría con la medida que el BCV tomará en los próximos días para acompañar las medidas económicas recientemente adoptadas.
Nueva Prensa de Oriente
Fuentes de economía venezolana señalan que los próximos billetes que entrarán en circulación serán los de Bs. 500 y Bs. 1.000, para permitir una mayor comodidad de las transacciones que se realizan en efectivo.
Por otra parte, tienen previsto eliminar los billetes de más baja denominación, ya que actualmente no tienen uso y terminan complicando las transacciones.
La idea que se plantea el BCV es redireccionar los recursos, esfuerzos de impresión y distribución de los billetes de Bs. 2 y Bs. 5 hasta los de más alta denominación y así darle mayor fluidez a las operaciones que se llevan a cabo entre los agentes económicos del mercado.
Esta decisión también apunta a que los servicios prestados por el sistema financiero a sus clientes se haga más eficiente y no implique un incremento sustancial y sostenido de sus costos de logística y funcionamiento.
Desde el sector bancario optan por esta iniciativa para que varias de sus actividades se hacen más fluidas, tanto en las agencias como en el suministro a los cajeros automáticos.
Con estos nuevos billetes la reposición de efectivo en agencias y cajeros automáticos se hará más eficiente porque requerirá de menos frecuencias, con lo que se disminuyen los riesgos inherentes al traslado de dinero en efectivo en los vehículos blindados.
Una queja continua de los usuarios son los largos recorridos que deben hacerse los fines de semana para “conseguir un cajero con plata”. Esta situación cambiaría con la medida que el BCV tomará en los próximos días para acompañar las medidas económicas recientemente adoptadas.
Nueva Prensa de Oriente