Este martes, la mayoría parlamentaria de la Asamblea Nacional aprobó
prorrogar por 60 días el estado de excepción de los municipios Bolívar,
Pedro María Ureña, Capacho nuevo, Capacho viejo y Rafael Urdaneta del
estado Táchira.
Dicha solicitud de prórroga constituyo el cuarto punto a debatir por los diputados, en la cual consideraron el decreto 2054 de fecha 19 de octubre del 2015, mediante el cual se prorroga por 60 días el estado de excepción, reseñó Noticias24.
Dicho decreto emitido por el Ejecutivo y ratificado por el parlamento en agosto pasado, pretende hacer frente al contrabando de extracción de alimentos y combustible, así como eliminar las prácticas paramilitares que afectan a la población de la zona limítrofe.
Al respecto, el diputado Fernando Soto Rojas consideró que esta es “una medida para resguardar los intereses legítimos del pueblo”, y aseguró que es necesario “normalizar esa situación política”.
Asimismo afirmó que “el Estado venezolano no podía seguir alimentando más de 9 millones de habitantes que estaban más allá de la frontera. Eso es sencillamente insostenible”.
Sobre el paramilitarismo y sus vinculaciones opositoras expresó: “Cuando uno guarda silencio es porque tiene complicidad”.
Por otro lado, diputados opositores en las voces de algunos como Andrés Velásquez por el estado Bolívar y Walter Martínez por el Táchira, argumentaron que el cierre fronterizo carece de validez constitucional y la infructuosidad de la medida, por lo que rechazaron la solicitud de prórroga.
A estas aseveraciones, el diputado Ricardo Sanguino celebró la medida como una “decisión acertada para la paz y el beneficio del pueblo” y aseguró que desde el decreto, en el estado Táchira “hay paz, no hay colas, han aparecido los alimentos”.
Asimismo argumentó que previo a la medida, el consumo de medicinas en el Táchira superaba el consumo del área metropolitana de Caracas motivado al contrabando de excepción.
“La decisión no es contra el pueblo colombiano, sino para afectar a los grupos militares que tenían sus vínculos con este lado del país”, reiteró.
ElNorte.com.ve / Ysamar Bastardo
Dicha solicitud de prórroga constituyo el cuarto punto a debatir por los diputados, en la cual consideraron el decreto 2054 de fecha 19 de octubre del 2015, mediante el cual se prorroga por 60 días el estado de excepción, reseñó Noticias24.
Dicho decreto emitido por el Ejecutivo y ratificado por el parlamento en agosto pasado, pretende hacer frente al contrabando de extracción de alimentos y combustible, así como eliminar las prácticas paramilitares que afectan a la población de la zona limítrofe.
Al respecto, el diputado Fernando Soto Rojas consideró que esta es “una medida para resguardar los intereses legítimos del pueblo”, y aseguró que es necesario “normalizar esa situación política”.
Asimismo afirmó que “el Estado venezolano no podía seguir alimentando más de 9 millones de habitantes que estaban más allá de la frontera. Eso es sencillamente insostenible”.
Sobre el paramilitarismo y sus vinculaciones opositoras expresó: “Cuando uno guarda silencio es porque tiene complicidad”.
Por otro lado, diputados opositores en las voces de algunos como Andrés Velásquez por el estado Bolívar y Walter Martínez por el Táchira, argumentaron que el cierre fronterizo carece de validez constitucional y la infructuosidad de la medida, por lo que rechazaron la solicitud de prórroga.
A estas aseveraciones, el diputado Ricardo Sanguino celebró la medida como una “decisión acertada para la paz y el beneficio del pueblo” y aseguró que desde el decreto, en el estado Táchira “hay paz, no hay colas, han aparecido los alimentos”.
Asimismo argumentó que previo a la medida, el consumo de medicinas en el Táchira superaba el consumo del área metropolitana de Caracas motivado al contrabando de excepción.
“La decisión no es contra el pueblo colombiano, sino para afectar a los grupos militares que tenían sus vínculos con este lado del país”, reiteró.
ElNorte.com.ve / Ysamar Bastardo