Los médicos del centro asistencial capitalino solo están
atendiendo a los pacientes en consultas que fueron pautadas antes de la
interrupción
Clara Maita, quien proviene del estado Guárico, expresó que ha viajado en tres oportunidades a la entidad anzoatiguense para conseguir una cita en Neurología, pero se devuelve a su lugar de origen sin lograrlo.
“Quiero iniciar mi control para el Parkinson y solicitar las medicinas por la farmacia de alto costo del Seguro Social. Aunque me quedo en casa de un familiar en mis traslados, la enfermedad no espera”.
Violeta Bellorín, de Boca de Uchire, dijo que no ha podido ser atendida por Traumatología porque su caso no amerita una revisión de emergencia por parte de los especialistas.
“Tengo un diagnóstico de osteopenia y no quiero correr el riesgo de recaer”.
Denuncia desde 2010
Yanet Cuiba, secretaria general del Sindicato Único de Empleados del Ministerio para la Salud (Sunep-Sas) explicó que las aguas negras llegaron al área de archivos, lo que representa una condición riesgosa para el personal administrativo. Mencionó que en 2010 el caso fue denunciada ante las autoridades de Saludanz. Sin embargo, nunca recibieron respuesta.
Acotó que actualmente carecen de papelería para realizar los formularios.
“En las instituciones de salud están violentando los derechos de los trabajadores, quienes laboran sin los materiales que requieren para el ejercicio de sus funciones”.
Según Cuiba, esta situación se ha observado en distintos recintos hospitalarios, por lo que empezarán a informar a las comunidades sobre el mal estado del sector salud.
A principios de mes, trabajadores de la Alcaldía de Sotillo y la Contraloría Alberto Lovera esterilizaron el área de emergencia, pero no hubo operativo de mantenimiento en otras salas.
El servicio de entrega de citas que presta el hospital Luis Razetti
de Barcelona está paralizado desde hace un mes porque los trabajadores
se niegan a ejercer sus labores en un ambiente contaminado y con
escasez de papelería.
Los médicos del centro asistencial
capitalino solo están atendiendo a los pacientes en consultas que
fueron pautadas antes de la interrupción. Clara Maita, quien proviene del estado Guárico, expresó que ha viajado en tres oportunidades a la entidad anzoatiguense para conseguir una cita en Neurología, pero se devuelve a su lugar de origen sin lograrlo.
“Quiero iniciar mi control para el Parkinson y solicitar las medicinas por la farmacia de alto costo del Seguro Social. Aunque me quedo en casa de un familiar en mis traslados, la enfermedad no espera”.
Violeta Bellorín, de Boca de Uchire, dijo que no ha podido ser atendida por Traumatología porque su caso no amerita una revisión de emergencia por parte de los especialistas.
“Tengo un diagnóstico de osteopenia y no quiero correr el riesgo de recaer”.
Denuncia desde 2010
Yanet Cuiba, secretaria general del Sindicato Único de Empleados del Ministerio para la Salud (Sunep-Sas) explicó que las aguas negras llegaron al área de archivos, lo que representa una condición riesgosa para el personal administrativo. Mencionó que en 2010 el caso fue denunciada ante las autoridades de Saludanz. Sin embargo, nunca recibieron respuesta.
Acotó que actualmente carecen de papelería para realizar los formularios.
“En las instituciones de salud están violentando los derechos de los trabajadores, quienes laboran sin los materiales que requieren para el ejercicio de sus funciones”.
Según Cuiba, esta situación se ha observado en distintos recintos hospitalarios, por lo que empezarán a informar a las comunidades sobre el mal estado del sector salud.
A principios de mes, trabajadores de la Alcaldía de Sotillo y la Contraloría Alberto Lovera esterilizaron el área de emergencia, pero no hubo operativo de mantenimiento en otras salas.