Desde la semana pasada, la red de establecimientos del Gobierno está
vendiendo los productos regulados sin exigir documento de identidad,
como el abasto cercano al elevado porteño
En el Abasto Bicentenario de la avenida Intercomunal no se ha terminado la venta por el número de cédula. En un recorrido realizado por El Tiempo se verificó que el supermercado continúa bajo esa modalidad.
Una cajera del establecimiento, quien omitió su identidad por no estar autorizada a declarar, expresó que mañana empezarían a vender sólo por la captahuellas.
El encargado de este supermercado aseguró que no han llegado las captahuellas que se utilizarán y por eso no saben exactamente cuándo eliminaran la venta por el terminal de la cédula.
En Makro de Pozuelos la situación continúa igual porque todavía la venta es por el documento de identidad. Trabajadores expresaron que están esperando las máquinas captahuellas.
En el Mercal ubicado en el sector La Carpa de Barcelona, la semana pasada fue eliminada la venta de esa forma. Los consumidores pueden comprar tres veces a la semana el mismo producto y si en días siguientes venden otros artículos también los pueden adquirir.
El Tigre y Anaco
En el Bicentenario de El Tigre la venta es libre, pero sigue funcionando la captahuellas para controlar la compra diaria. En cambio en Locatel, pese a que quitaron la venta por cédula, no hay captahuellas ni un sistema que permita verificar las veces que compre un cliente. Incluso ayer la cola en ese establecimiento era descomunal para adquirir toallas sanitarias.
En Anaco los consumidores acuden al Abasto Bicentenario cuando el terminal de su número de cédula se los permite.
A partir de las 5:00 de la madrugada uno a uno van llegando para asegurarse que saldrán “vencedores” al conseguir alguno de los productos regulados.
María Gómez manifestó que “sueña con la eliminación de las compras por número de cédula”.
Ayer comenzaron a eliminar el sistema de compras por terminal de
cédula de identidad en varios establecimientos comerciales administrados
por el Gobierno nacional, como el caso del Bicentenario ubicado en el
centro comercial Judibana de Puerto La Cruz y en el de El Tigre.
En
el abasto porteño se formaron largas colas, según dijo Belkys Mata,
quien aplaudió la medida porque “ahora puedo acudir cualquier día a
adquirir los productos básicos”.En el Abasto Bicentenario de la avenida Intercomunal no se ha terminado la venta por el número de cédula. En un recorrido realizado por El Tiempo se verificó que el supermercado continúa bajo esa modalidad.
Una cajera del establecimiento, quien omitió su identidad por no estar autorizada a declarar, expresó que mañana empezarían a vender sólo por la captahuellas.
El encargado de este supermercado aseguró que no han llegado las captahuellas que se utilizarán y por eso no saben exactamente cuándo eliminaran la venta por el terminal de la cédula.
En Makro de Pozuelos la situación continúa igual porque todavía la venta es por el documento de identidad. Trabajadores expresaron que están esperando las máquinas captahuellas.
En el Mercal ubicado en el sector La Carpa de Barcelona, la semana pasada fue eliminada la venta de esa forma. Los consumidores pueden comprar tres veces a la semana el mismo producto y si en días siguientes venden otros artículos también los pueden adquirir.
El Tigre y Anaco
En el Bicentenario de El Tigre la venta es libre, pero sigue funcionando la captahuellas para controlar la compra diaria. En cambio en Locatel, pese a que quitaron la venta por cédula, no hay captahuellas ni un sistema que permita verificar las veces que compre un cliente. Incluso ayer la cola en ese establecimiento era descomunal para adquirir toallas sanitarias.
En Anaco los consumidores acuden al Abasto Bicentenario cuando el terminal de su número de cédula se los permite.
A partir de las 5:00 de la madrugada uno a uno van llegando para asegurarse que saldrán “vencedores” al conseguir alguno de los productos regulados.
María Gómez manifestó que “sueña con la eliminación de las compras por número de cédula”.
Misma realidad
Karina Monroi aseguró que las colas se han mantenido igual a las de semanas atrás, pues pasó casi dos horas en el supermercado Bicentenario ubicado en el centro comercial Judibana de Puerto La Cruz. Aplaudió no tener que mostrar su cédula.
Karina Monroi aseguró que las colas se han mantenido igual a las de semanas atrás, pues pasó casi dos horas en el supermercado Bicentenario ubicado en el centro comercial Judibana de Puerto La Cruz. Aplaudió no tener que mostrar su cédula.