En el Unicasa del centro comercial Plaza Mayor de Lechería, siguen
las limitaciones. Usuaria del supermercado expresó que es necesario que
se levante la medida
En estos establecimientos comerciales
restringen la venta de los productos regulados pues algunos no tienen
las máquinas captahuellas para llevar un control. Un día después de la eliminación de compras por
cédula de identidad (CI) en el abasto Bicentenario de Puerto La Cruz, El
Tiempo realizó un recorrido por varios supermercados privados de
Barcelona y Puerto La Cruz, donde se verificó que continúan vendiendo
bajo esta modalidad.
En el Central Madeirense de Nueva Barcelona varios curiosos preguntaban ayer a quienes salían de las instalaciones si ya estaban vendiendo “para todo el mundo”.
Allí se vendió ayer papel sanitario y margarina.
En el Unicasa del centro comercial Plaza Mayor de Lechería, también continúan las limitaciones. Oneida Rojas, una de las usuarias del supermercado, expresó que es necesario que se levante la medida.
En Unicasa de Puerto La Cruz, estaban atendiendo a las personas con los terminales 8 y 9. Los único producto regulado que estaban despachando eran papel higiénico y pasta alimenticia..
Una empleada del local, que no reveló su nombre, dijo que están a la espera de las máquinas captahuellas para eliminar el sistema de venta por la CI.
“Al parecer las máquinas llegarán a final de mes, por ello debemos seguir atendiendo por el terminal de la cédula de identidad”.
Sin número
En otro de los establecimientos del Gobierno, el Gran Abasto Bicentenario de la avenida Intercomunal se comenzó a vender a los ciudadanos sin importar la numeración final del documento, pues ahora cuenta con máquinas captahuellas.
María Rivero, una de las usuarias del supermercado, señaló que la medida es positiva porque regularmente los días que les tocaba comprar no conseguía productos escasos.
Luisa Campos, otra de las consultadas, comentó que aunque es una decisión justa, podría generar que se incrementen las colas fuera de los establecimientos. “Hoy (ayer) no hubo porque sólo estaban vendiendo harina, pero no me quiero imaginar otro día”.
En el Central Madeirense de Nueva Barcelona varios curiosos preguntaban ayer a quienes salían de las instalaciones si ya estaban vendiendo “para todo el mundo”.
Allí se vendió ayer papel sanitario y margarina.
En el Unicasa del centro comercial Plaza Mayor de Lechería, también continúan las limitaciones. Oneida Rojas, una de las usuarias del supermercado, expresó que es necesario que se levante la medida.
En Unicasa de Puerto La Cruz, estaban atendiendo a las personas con los terminales 8 y 9. Los único producto regulado que estaban despachando eran papel higiénico y pasta alimenticia..
Una empleada del local, que no reveló su nombre, dijo que están a la espera de las máquinas captahuellas para eliminar el sistema de venta por la CI.
“Al parecer las máquinas llegarán a final de mes, por ello debemos seguir atendiendo por el terminal de la cédula de identidad”.
Sin número
En otro de los establecimientos del Gobierno, el Gran Abasto Bicentenario de la avenida Intercomunal se comenzó a vender a los ciudadanos sin importar la numeración final del documento, pues ahora cuenta con máquinas captahuellas.
María Rivero, una de las usuarias del supermercado, señaló que la medida es positiva porque regularmente los días que les tocaba comprar no conseguía productos escasos.
Luisa Campos, otra de las consultadas, comentó que aunque es una decisión justa, podría generar que se incrementen las colas fuera de los establecimientos. “Hoy (ayer) no hubo porque sólo estaban vendiendo harina, pero no me quiero imaginar otro día”.
Reacción
En Central Madeirense de la avenida Municipal de Puerto La Cruz siguen las ventas por cédula. Según el señor Carlos Gil, la modalidad del captahuella limitará más a los clientes, porque quedarán registrados en el sistema y no podrán comprar de nuevo.
En Central Madeirense de la avenida Municipal de Puerto La Cruz siguen las ventas por cédula. Según el señor Carlos Gil, la modalidad del captahuella limitará más a los clientes, porque quedarán registrados en el sistema y no podrán comprar de nuevo.